El partido en el Pizjuán acabó con un botellazo a Iker Casillas, que recibió un impacto después que una botella le rozara la cabeza con anterioridad. El meta del Real Madrid acabó tendido en el terreno de juego, pero finalmente se recuperó.
Un recogepelotas cogió la botella para esconderla y salió corriendo, ante las quejas de los componentes del banquillo del Real Madrid. El meta comentó al término del encuentro que "algún vándalo que siempre está aquí me ha tirado una botella. Yo creo que esto no empaña a una afición espléndida y que siempre viene a ayudar todo lo posible. Ha sido algún estúpido que puede crear algún problema a la afición", dijo Casillas en declaraciones a Canal Plus.
"No voy a hablar nada, pero si lo han captado las cámaras se tomarán medidas", manifestó el portero mostoleño del Real Madrid, que fue objeto de dos lanzamientos. El primero no le impactó, pero el segundo cayó sobre su cabeza.
En relación al partido, Casillas prefirió mostrarse cauto pese a la victoria. "La eliminatoria no está decidida. Es un resultado óptimo, pero no hemos encajado gol y hemos marcado uno. No debemos relajarnos porque el Sevilla es muy bueno y tiene jugadores importantes", añadió.
Por último, el meta madrileño se refirió al 'gol fantasma' de Luis Fabiano, que no fue concedido por el árbitro al término de la primera parte. "El balón casi entra, pero no ha entrado. Si no ha entrado, está claro", finalizó Casillas.

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Otro ejemplo de que este grupo no deben ir a los estadios de futbol.