Es lo que tiene pasar de pobre a rico. Es lo que pasa cuando se crean grandes expectativas alrededor de un equipo que en los últimos años suspiraba por mantener la categoría en la última jornada o por dejar atras una proceso concursal que miraba el céntimo en los gastos. En los tres últimos partidos el equipo se ha mostrado como un conjunto endeble, frio, lento y muy falto de intensidad. Por eso dos modestos como Levante y Rayo han sido capaces de "desnudarnos" con facilidad, simplemente jugando con más intensidad y motivación. El dinero no gana partidos por sí solo en este deporte, hay que correr al mismo nivel que los pequeños para que se imponga la calidad, y de momento no está siendo el caso. Incluso contra el Madrid, el equipo pequeño pareció ser el equipo de Mou, mientras que el Málaga salio a verlas venir, viendo como el rival le presionaba y robaba como quería. Insólito que el Madrid muestre más intensidad que su rival, que juega en casa. No sé realmente qué capacidad de transmitir y motivar tendrá Pellegrini pero tengo muchas dudas sobre esta faceta del técnico. Yo creo que estas derrotas tienen que servir para despertar al equipo, para que sepan que no será un grande hasta que haga méritos. Estoy confiado en que pronto encontremos la buena senda, porque creo que esta racha tiene fin más pronto que tarde. En lo técnico, y como creo que la mayoría de malaguistas pensamos, tenemos una carencia en un puesto vital en cualquier equipo, el medio centro. Está claro que Duda no encaja ahí. Es lento, conduce demasiado y no juega al primer toque. De momento, la vuelta de Apoño debería notarse a corto plazo, que por cierto, estuvo 7 u 8 partidos sin jugar, los mismos que merece Eliseu por su niñería, ya reincidente. Bueno, esperemos volver a celebrar el domingo una victoria, y que haya ese cambio de actitud que demanda el malaguismo.

Saludos.