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14 Abr 2011, 11:25
Pellegrini comienza a valorar más el compromiso que el estado físico de los jugadores
Ensaya en el posible once titular ante el Mallorca con Baptista, ansioso por ayudar al equipo en la recta final para lograr el objetivo .
S. CORTÉS | MÁLAGA..-
Es la hora de la verdad. Lo saben los jugadores y, por supuesto, lo sabe el cuerpo técnico. Por esa razón, Manuel Pellegrini ya comienza a valorar más el compromiso de los futbolistas, por encima del nivel físico que puedan ofrecer a estas alturas del campeonato (como ocurre con Maresca). El componente anímico es fundamental para aportar más incluso del cien por cien y contribuir así a la permanencia del equipo.
El mejor ejemplo de ello es Baptista, cuya recuperación va por delante de lo previsto. En el seno del club contemplaban que el brasileño estuviera a disposición del técnico los cinco últimos partidos del campeonato. En principio, si nada se tuerce, el medio punta podrá participar el sábado en La Rosaleda frente al Mallorca (18.00 horas); es decir, con dos jornadas de antelación.
El nivel de compromiso de Baptista es indudable -como ya apuntó este periódico cuando él estaba inmerso en el proceso de recuperación en Brasil- y el jugador está ansioso por ayudar al equipo en la recta final. Ayer, en declaraciones a Punto Radio Málaga (93.4 FM), el medio punta recalcó que no se considera el salvador del equipo en esta recta final, sino «uno más». Además, insistió en que ya no valen los mensajes, sino que apeló a que cada futbolista dé el máximo en el terreno de juego.
Carácter
Baptista, uno de los fichajes que llegaron en invierno para apuntalar al equipo con más carácter (junto a Demichelis y Maresca), fue incluido ayer por Pellegrini en el posible once titular frente al conjunto balear. Y aunque no debe suponer un dato relevante, sí resulta elocuente dado el empeño del brasileño en jugar cuanto antes. Si bien es cierto que su incorporación no debe precipitarse (el martes empezó a trabajar con balón) y que en otras circunstancias estaría para quince o veinte minutos, ya cuando llegó fue fijo y, además, la situación del Málaga obliga a arriesgar más de la cuenta.
Mientras tanto, el técnico chileno prosigue a la espera de conocer el estado físico de Apoño (ayer volvió a trabajar al margen debido a sus molestias) y parece decidido a elegir a Mtiliga como sustituto de Eliseu, sancionado por acumulación de amonestaciones.