Pablo Arriaza nació el 20 de agosto de 2003 en Málaga. Mide 1,77 m y pesa aproximadamente 71 kg.

Su formación ha sido larga en las categorías inferiores del club: pasó por el Cadete, Juvenil B y Juvenil A del Málaga, además de una etapa en CD San Félix como juvenil. En 2022 pasó a formar parte del filial del Málaga, el Atlético Malagueño.

Inicialmente era central, pero con el tiempo se reconvirtió en mediocentro defensivo —un “pivote� —, lo que habla de su adaptabilidad. En la temporada 2024/25 fue clave en el ascenso del filial a la Segunda Federación, y se le considera uno de los capitanes del equipo por su regularidad y liderazgo.

En mayo de 2025 firmó una renovación con el Málaga hasta 2027, lo que evidencia la confianza del club en su proyección.

Su debut oficial con el primer equipo tuvo lugar el 3 de diciembre de 2025, en el partido de la segunda ronda de la Copa del Rey contra el CF Talavera de la Reina. Entró en el once titular y jugó los 90 minutos del encuentro. Ese día el Málaga salió con un once mayoritariamente joven y con varios canteranos, siendo Arriaza “el debutante oficial� bajo el técnico Juan Francisco Funes. Aunque el partido no acabó bien para el club (derrota 2-1 y eliminación de la Copa), fue un momento importante para Arriaza: su “bautizo� con el primer equipo.

Arriaza es visto como uno de los grandes exponentes del proyecto de cantera del Málaga: juvenil canterano, con recorrido desde abajo, reconversión táctica, liderazgo en el filial y ahora puente hacia el primer equipo.

Su perfil mezcla juventud, versatilidad (puede jugar de central o mediocentro defensivo), humildad y adaptación, valores muy apreciados en un club que busca reconstruirse desde la base.

Si sigue su progresión, podría ser una pieza habitual en la medular o defensa del Málaga en los próximos años, especialmente porque ya ha comenzado a tener oportunidades reales.