Sebastián Bruno Fernández Miglierina, jugador del Málaga CF
"En mis goles y en mi juego nunca entró la estética"
Sebastián Fernández, titular las últimas tres jornadas y autor de dos goles, ejemplifica como pocos en el terreno de juego la fe y la garra: "Siempre hay una mejor ocasión esperándote a la vuelta de la esquina".
Redacción, Málaga | Actualizado 10.12.2011 - 09:17
"El que más lucha en el campo, el que se mata", le decía ayer a Sebastián Fernández una aficionada que estaba aguardando su salida para pedirle un autógrafo. El reconocimiento de la afición para con él es algo que agradece este uruguayo, inseparable de su mate y que ayer portaba un libro didáctico sobre fútbol. "Me lo dio el profe para un amigo. Yo no me veo entrenando; sí, quizás, de segundo", dijo sobre la citada lectura un jugador al que carácter no le faltaría para ello.
-Su sinceridad tras el partido de Anoeta fue de agradecer.
-¿Por qué?
-Pues porque, que alguien diga realmente lo que piensa o siente, es una virtud que no abunda en el mundo del fútbol.
-¡Ah, bueno! Yo qué sé… En general intento decir siempre lo que pienso. Mientras no moleste a nadie, lo voy a seguir haciendo.
-¿Hablar claro le ha acarreado problemas alguna vez?
-No, no. Por suerte no, porque hablo claro y, como te dije, intento no ofender a nadie. Sólo digo cómo veo yo las cosas, nada más.
-El pasado verano tuvo que ser de incertidumbre para usted.
-Siempre. El fútbol es así, cambia mucho. A veces estás jugando, eres titular, haciendo goles. Otras te toca estar en un segundo plano, pero yo intento mantener la tranquilidad siempre y, teniendo un contrato como el que tengo acá, hay un poco de inseguridad, pero la verdad es que tengo bastante tranquilidad, como hace mucho tiempo que no la tenía.
-Se lo decía porque me consta que su hermano estuvo indagando qué otras posibilidades de futuro podía tener.
-Otras posibilidades siempre hay, porque por suerte donde he ido he hecho bien las cosas y la gente se acuerda de eso. Entonces, siempre aparece alguna posibilidad, por más que no sea para ir hacia arriba, pero sí buenos clubes. Siempre, cuando la gente ve que uno no está jugando y que puede ser una posibilidad, entonces me llaman. Pero real, real, que hubiera estado cerca, no hubo ninguna.
-¿Le dijeron que se buscara otro destino o es que al ver tantos fichajes se preocupó por no poder disfrutar de los minutos que quería?
-No, no. Como no jugaba, algunos me comenzaron a llamar para ver si me interesaba irme a algún lado para jugar un poco más. Pero yo sentía que había terminado bien la temporada, haciendo una buena segunda mitad de campeonato, y por eso estaba tranquilo.
-Entonces, ni las contempló.
-No, yo no. Lo que pasa es que siempre te tienta volver a tu casa. Pero el club me puso muy claro que ellos me querían y que no estaban dispuestos a que me fuera.
-Empezó la temporada como secundario.
-Sí. Esto es fútbol y es así. Está bien, porque vino gente muy importante, pero lo que tiene el míster es que nos trata a todos por igual. Después se me presentó la oportunidad de jugar y me parece que lo estoy haciendo bastante bien. Es el míster el que siempre va a elegir quién juega o no y yo siempre lo voy a respetar.
-Se ve que es de los que no se rinden. Las últimas tres jornadas ha sido titular y ha marcado dos goles.
-Sí, por suerte fue así. Es muy difícil que me rinda. Soy muy terco y por eso no me voy a rendir.
-Desde fuera, su gran virtud es la lucha, la entrega, la garra. En su fuero interno, ¿cuál cree que es en realidad?
-No sé, la verdad. Eso es lo que se ve más desde fuera, y es una de las características que intento no perder nunca cuando entro en la cancha. Y lo que también intento es mejorar todo el resto.
-Se habrá dado cuenta de que por esa autoexigencia física que le comentaba es de los, digamos protegidos, de la grada.
-Ja, ja, sí. Con la gente en Málaga estoy muy agradecido. La gente reconoce el esfuerzo y es muy lindo.
-Y, sin ser usted un goleador, ya sólo Cazorla ha marcado más tantos en el equipo en Liga.
-Sí, bueno. No soy un gran goleador pero me parece que, desde que vine acá, no he hecho pocos goles. Para mí está bastante bien y espero seguir haciendo. ¿Y por qué no llegar a serlo más adelante? ¿Quién te lo dice? Tampoco me niego a serlo [dice entre sonrisas].
-De sus dos tantos, no se puede decir que la estética sea su sello, aunque el de Santander entró como un obús.
-Nunca, nunca. En mis goles y en mi juego nunca entró la estética. El de Santander fue más bonito, pero siempre termino tirándome al suelo y haciendo que el gol no sea tan bonito [se ríe].
-El que logró en Anoeta era más difícil de prever que llegara que otras ocasiones que se le han presentado. ¿Cómo lo explica?
-No era una ocasión clara de gol, robé el balón y pude hacerlo. Pero esto es el fútbol, a veces algunas se van y otras van para adentro. Hay que seguir para adelante y estar convencido de que la siguiente va a ser gol, nada más.
-Hay que tener mucha fe.
-Sí, sí, mucha fe, no bajar los brazos y seguir esforzándote, seguir creyendo que la próxima va a salir mejor. Siempre hay una oportunidad mejor esperándote a la vuelta de la esquina.
-¿Y si se pone en la piel del defensa de la Real Sociedad?
-Bueno, a mí me ha tocado también errar goles y perder partidos. Son momentos que nos pasan a todos y chao. Él se distrajo un poco y me tocó ganar a mí esa vez, pero seguramente la vez siguiente le toque a él. Al final ese día le tocó ganar, así que viste cómo es el fútbol.
-¿El partido del año pasado ante Osasuna en La Rosaleda es de los que marcan?
-Sí, por supuesto. Estábamos en un momento que no nos salía nada, que venía todo difícil. Era un momento para empezar a despegar un poco, empezar a ganar. Era un rival muy, muy directo por la lucha por el descenso en ese momento y nos ganó de local. Pero, como hablamos recién, siempre hay que mirar para adelante, siempre esperar una mejor. Al final nos dio resultado, hicimos un gran final de año y nos pudimos salvar, que fue muy importante para nosotros y para el club.
-Usted ya no estaba en el campo cuando marcó Sergio. ¿Recuerda cómo lo vivió?
-Es duro y es una frustración más. En el fútbol tenemos muchas frustraciones muy seguidas y, bueno, aprendes a levantarte y a seguir adelante, porque si te quedas frustrado no puedes llegar a nada. Entonces, siempre hay que seguir, y nada más. Es parte de esta carrera y es lo que elegimos.
-¿Tiene una receta contra esas frustraciones?
-No tienen receta. Lo único, seguir para adelante y saber que te va a tocar perder muchas veces y que también te va a tocar ganar. Así que hay que estar muy tranquilo y seguir.
-Se pusieron colistas. ¿Qué lectura sacaron?
-¡Estuvimos colistas mucho tiempo! Yo tenía mucha fe. Fui de los que nunca miré ni la tabla, ni nada. Sabiendo que estábamos últimos, no esperaba que perdieran los rivales, sino que sabía que lo que teníamos que hacer era ganar todos los partidos y no hacer números. Por suerte, nos salió bien.
-¿Y qué hay que esperar entonces para este domingo?
-Esperar hacer un gran partido, un partido muy duro. Osasuna es un gran equipo, está nada más que a dos puntos nuestro. Sabemos que, si nos ganan, nos complicarían estar en los puestos de Europa. Ellos se defienden muy bien y están muy bien a la contra. Han hecho grandes partidos los últimos tres o cuatro y va a costar mucho. Que la gente no se espere que vamos a ganar fácil.
-Joaquín vuelve. ¿Le afecta directamente?
-No, para nada. Eso le hace muy bien al equipo, a todos los jugadores y a mí también, que soy compañero suyo y es un grandísimo jugador.
http://www.malagahoy.es/article/deporte ... etica.htmlInsustituible en nuestro Málaga. Un orgullo tener a este chico con nosotros.