Rafita, un ejemplo de la importancia de apostar por el fútbol base malagueño
El lateral se formó en clubes de la provincia como el Puerto Malagueño y el Francisco Castejón
Alberto S. Fernández | MÁLAGA HOY
En mitad de todas las noticias negativas de la actualidad en clave Málaga CF, hay una positiva que es el debut deportivo de Rafita, jugador del filial, con el primer equipo en un compromiso liguero de LaLiga Hypermotion. El lateral derecho siguió los pasos de Ángel Recio, su capitán, y se estrenó en el fútbol profesional, aprovechando la plaga de bajas del conjunto entrenado por Sergio Pellicer.
Antes de llegar a este punto, el futbolista malagueño ha tenido una trayectoria sólida en el fútbol base de la provincia, jugando la recta final de su etapa formativa en las categorías inferiores del club de Martiricos, pero, antes de esto, comenzó sus primeros pasos en las filas del Puerto Malagueño.
Estuvo dos temporadas (la 2018/19 y la 2019/20) jugando en el club de la barriada de Ciudad Jardín durante su paso por la categoría de cadete con un ascenso con el segundo equipo el primer año, jugando Segunda Andaluza, mientras que logró una sexta plaza la siguiente campaña, disputando la División de Honor, que es un nido de talentos con posibilidades de ser futuros futbolistas.
Tras esto, Rafita puso rumbo a su Vélez-Málaga natal para jugar su primer año de juvenil en las filas de la Escuela de Fútbol Francisco Castejón en la temporada 2020/21. Hizo los mejores números de su carrera esa campaña con 24 goles anotados en 27 partidos disputados.
Para el siguiente curso, ya pertenecía al organigrama del Málaga CF, pero jugó su primer curso en el CD San Félix, que, en ese entonces, tenía un acuerdo de filialidad con los de Martiricos. Actualmente, esta es su tercera temporada como jugador del Atlético Malagueño a las órdenes de Funes y Bravo y, poco a poco, va tomando cada vez más importancia, aunque ahora no tenga tanta continuidad desde que ayuda al primer equipo a paliar la baja derivada de la lesión de Carlos Puga.