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30 Ago 2015, 18:00
Hoy me siento triste, la venta de Darder con nocturnidad y alevosía hace incomprensible el discurso de ilusión que no hace ni una semana nos transmitió el Sr. Casado en 101 tv. Por eso escribo solo dos palabras para expresar lo que no sé definir si como rabia e indignación o como desilusión y desencanto. Sinceramente, la inmensa mayoría de malaguistas nos sentimos engañados. No se puede salir diciendo que la situación económica está encarrilada, que hemos salido de la uvi y ya estamos en la puerta del hospital, y horas después actuar con la desesperación del que le va la vida en la venta de un activo. No, esto no es normal, a no ser que el club sea rehén de intereses ajenos a lo que para mí son las dos premisas fundamentales para el buen caminar del club: la viabilidad económica y el encanto e ilusión de la masa social, esa que orgullosamente todos llamamos malaguismo y definimos como la mejor del país.
¡Cuidado!, en esta empresa no se venden lavadoras ni televisores, aquí se vende algo más, aquí se vende algo que sale del corazón, algo que ilusiona e identifica a un colectivo con el proyecto de unos colores, ¡¡cuidado!!, no vayamos a romper la sinergia y simbiosis de estos dos aspectos muy bien definidos y que son fundamentales para su funcionamiento.
Sr. Casado, no dejemos que los árboles nos impidan ver el bosque, sabemos que el equilibrio de todos los parámetros que intervienen en la estructura del club son básicos y fundamentales para llegar a buen puerto, no rompamos esa necesaria armonía olvidándonos del verdadero sostén de una empresa como ésta.
Considero y le pido respetuosamente en nombre de miles de malaguistas que de una vez por todas, nos presente la realidad de la situación, los verdaderos intereses de la propiedad y gestores, si es verdad que hemos salido de la UVI y ya no hay peligro de muerte.
Saludos.
Rafael Navarrete.