La gran cacicada electoral
21 Ago 2014, 22:45
PARA LAS MUNICIPALES DE 2015
La reforma para la elección directa de alcaldes del Gobierno lo enfrenta con PSOE, IU y UPyD
Toda la oposición rechaza en bloque la reforma electoral, a la que tildan de 'pucherazo', mientras los populares tienden la mano al diálogo y piden propuestas
REPÚBLICA/AGENCIAS | MADRID PUBLICADA EL 20-08-2014
La reforma de la Ley Orgánica de Régimen Electoral que el Gobierno podría aprobar sin el respaldo de la oposición en otoño provoca la primera 'bronca' con toda la oposición antes incluso de que comience oficialmente el curso político. El PSOE ha asegurado este miércoles que no negociará la elección directa de alcaldes "ni ahora ni nunca" porque, argumenta, "sería avalar un intento antidemocrático y regresivo". Desde el PP, por su parte, abren la puerta al diálogo y piden propuestas para matizar una medida que el Ejecutivo pretende aprobar con rapidez para que entre en vigor en las próximas elecciones autonómicas y municipales de mayo de 2015. Fuentes populares confirmaron a El País y El Mundo, que la intención del gabinete de Mariano Rajoy es dar luz verde a la reforma desoyendo así la petición del nuevo dirigente socialista, Pedro Sánchez, de que se negocie más adelante. Tanto UPyD como IU también han mostrado su rechazo a la elección directa de alcaldes señalando que supone un 'pucherazo electoral' y una 'medida de degeneración democrática' cuando la ciudadanía pide regeneración democrática. Ambas formaciones ven que la reforma, que nace del 'miedo' y el 'nerviosismo' del PP, busca únicamente aferrarse al poder a toda costa saltándose las vías democráticas.
Según fuentes populares citadas por ambos diarios, la intención de Rajoy es iniciar los contactos con el resto de partidos nada más concluir las vacaciones para intentar que la reforma sea aprobada en otoño y se aplique ya en los próximos comicios.
El PSOE ha advertido este miércoles de que “no hay negociación posible” , “ni ahora ni nunca”, ya que se trata de un planteamiento “profundamente antidemocrático” de los populares, que pretenden “burlas las mayorías que dan o niegan los ciudadanos”, y “blindar” alcaldías “que van a perder” en los próximos comicios municipales.
Así lo ha manifestado el alcalde de Vigo, vicepresidente de la FEMP y miembro de la Ejecutiva socialista, Abel Caballero, quien ha subrayado que el PP ha hecho este planteamiento por el “pésimo resultado” obtenido en las elecciones europeas”. A su juicio, “el PP pretende cambiar las reglas del juego para mantener alcaldías que los votos de los ciudadanos les van a negar”.
El vicepresidente de la FEMP y regidor olívico ha recalcado que “antes de elecciones, no es momento de negociar nada”. “Y después de elecciones, sobre un proyecto distinto, con presencia de todos los grupos del arco parlamentario, se puede hablar”, ha añadido.
Arenas pide a Sánchez que dé ideas
Negociación es precisamente lo que propone el PP ante esta postura. El vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, ha garantizado este miércoles el diálogo con el resto de partidos políticos y ha manifestado que Pedro Sánchez, al que pide propuestas, “debería hacer un ejercicio de coherencia” porque el PSOE ha propuesto “en multitud de ocasiones” la elección directa de alcaldes.
Arenas ha dicho que la mayoría de los ciudadanos comparte “una reforma electoral muy simple: que el que gana gobierne y el que pierda, a la oposición“, y ha opinado que el diálogo con el PSOE es “esencial” como segunda fuerza política en España pero no se puede “menospreciar” la posición del resto de grupos parlamentarios.
Pedro Sánchez ya transmitió al presidente del Ejecutivo su oposición a esta medida en la entrevista que ambos mantuvieron el pasado mes de julio. Posteriormente, sin embargo, dejó una puerta abierta a una futura negociación, aunque con el objetivo puesto más allá de las municipales de mayo de 2015.
El PP defiende que esta reforma estaba incluida en su programa electoral, en el que se cita una modificación “para respetar la voluntad mayoritaria”, sin más especificaciones. Sin embargo, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, declaró que “nunca” modificaría el sistema “por mayoría”, como posiblemente ocurra en el Congreso el próximo otoño.
Sin precendentes
En caso de prosperar la propuesta solo con los votos mayoritarios del PP, sería la primera ocasión en democracia en que la ley electoral sería modificada sin el consenso de los dos principales partidos.
Sin el respaldo socialista -aunque muchos consideran que la modificación podría favorecer casi tanto como a los populares (“Este cambio puede beneficiar a los dos”, declaró a El Mundo un diputado popular)-, el partido del Gobierno confía en poder convencer a CiU y al PNV.
Una de las alternativas que baraja Rajoy para conseguir socios en esta empresa es plantear una segunda vuelta en la elección de alcaldes, pero esta propuesta no convence incluso dentro de su partido. La secretaria general, María Dolores de Cospedal, planteó hace unas semanas que sólo se aplique si el más votado no consigue un determinado porcentaje de votos que habría que marcar. El PSOE y UPyD, sin embargo, se muestran favorables a la segunda vuelta independientemente del tanto por ciento de votos.
Los decepcionantes resultados en las últimas elecciones europeas, con la irrupción de partidos minoritarios como Podemos, la consolidación de UPyD y Ciudadanos y el ascenso de Izquierda Unida, podrían haber precipitado la decisión de Rajoy de modificar un modelo que hasta ahora no había puesto en peligro el bipartidismo PP-PSOE.
El PSOE ha asegurado este miércoles que no negociará la elección directa de alcaldes “ni ahora ni nunca” porque, argumenta, “sería avalar un intento antidemocrático y regresivo”.
“El PP sólo busca una elección directa: la del PP”, ha publicado Sánchez en la red social Twitter. Esa es su respuesta a la voluntad del PP de sacar adelante la reforma electoral para que gane la lista más votada y no haya lugar para pactos en los ayuntamientos.
El PSOE no se niega, sin embargo, a una posible modificación que incluyera la elección a doble vuelta y ha dejado la puerta abierta al diálogo, aunque insiste en que debe ser una medida estudiada en profundidad y promovida, por tanto, para después de 2015.
Por su parte, la portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha advertido de que si el PP decide sacar adelante la reforma en solitario cometería “un golpe de mano democrático, un atentado a la pluralidad y a las reglas del juego”. La portavoz de la formación magenta ha alertado de que sería “un gravísimo precedente”, por lo que ha confiado en que el partido del Gobierno recapacite y no acometa un cambio que no sería “de regeneración, sino de degeneración”.
IU no negociará
El portavoz de IU en el Congreso, José Luis Centella, ha anunciado ya que su partido no entrará “en ningún tipo de negociación”. “Si el PP quiere cambiar la ley electoral, que lo lleve en su programa para las próximas elecciones. Que sean las próximas Cortes las que decidan”, ha asegurado Centella en declaraciones a EFE.
Centella ha recomendado al PP “ser prudente” en este asunto, porque, si aprueba la reforma ”de manera unilateral, a seis meses de las elecciones y a un año del final de la legislatura”, rompería “todos los canales de comunicación” con la oposición.
Además, ha advertido de que desde su partido utilizarán “todos los recursos” para frenar la reforma, y añade que será “una ley de ida y vuelta” que estará en vigor lo que dure la mayoría absoluta del PP. Esta ley, ha dicho, “evidencia el nerviosismo del PP, que se empeña en hacer la ley electoral más restrictiva y completamente trucada”.
La sorpresa ha sido el rechazo de EH Bildu, una formación que podría verse beneficiado por la reforma y obtener muchas pequeñas alcaldías en el País Vasco. Sin embargo, los parlamentarios Maribi Ugarteburu y Oskar Matute se han opuesto a la medida y han opinado que si el PP la aprueba, “ahondará en un estrechamiento de las libertades y de la propia democracia”.
http://www.republica.com/2014/08/20/la- ... oe_833091/
La reforma para la elección directa de alcaldes del Gobierno lo enfrenta con PSOE, IU y UPyD
Toda la oposición rechaza en bloque la reforma electoral, a la que tildan de 'pucherazo', mientras los populares tienden la mano al diálogo y piden propuestas
REPÚBLICA/AGENCIAS | MADRID PUBLICADA EL 20-08-2014
La reforma de la Ley Orgánica de Régimen Electoral que el Gobierno podría aprobar sin el respaldo de la oposición en otoño provoca la primera 'bronca' con toda la oposición antes incluso de que comience oficialmente el curso político. El PSOE ha asegurado este miércoles que no negociará la elección directa de alcaldes "ni ahora ni nunca" porque, argumenta, "sería avalar un intento antidemocrático y regresivo". Desde el PP, por su parte, abren la puerta al diálogo y piden propuestas para matizar una medida que el Ejecutivo pretende aprobar con rapidez para que entre en vigor en las próximas elecciones autonómicas y municipales de mayo de 2015. Fuentes populares confirmaron a El País y El Mundo, que la intención del gabinete de Mariano Rajoy es dar luz verde a la reforma desoyendo así la petición del nuevo dirigente socialista, Pedro Sánchez, de que se negocie más adelante. Tanto UPyD como IU también han mostrado su rechazo a la elección directa de alcaldes señalando que supone un 'pucherazo electoral' y una 'medida de degeneración democrática' cuando la ciudadanía pide regeneración democrática. Ambas formaciones ven que la reforma, que nace del 'miedo' y el 'nerviosismo' del PP, busca únicamente aferrarse al poder a toda costa saltándose las vías democráticas.
Según fuentes populares citadas por ambos diarios, la intención de Rajoy es iniciar los contactos con el resto de partidos nada más concluir las vacaciones para intentar que la reforma sea aprobada en otoño y se aplique ya en los próximos comicios.
El PSOE ha advertido este miércoles de que “no hay negociación posible” , “ni ahora ni nunca”, ya que se trata de un planteamiento “profundamente antidemocrático” de los populares, que pretenden “burlas las mayorías que dan o niegan los ciudadanos”, y “blindar” alcaldías “que van a perder” en los próximos comicios municipales.
Así lo ha manifestado el alcalde de Vigo, vicepresidente de la FEMP y miembro de la Ejecutiva socialista, Abel Caballero, quien ha subrayado que el PP ha hecho este planteamiento por el “pésimo resultado” obtenido en las elecciones europeas”. A su juicio, “el PP pretende cambiar las reglas del juego para mantener alcaldías que los votos de los ciudadanos les van a negar”.
El vicepresidente de la FEMP y regidor olívico ha recalcado que “antes de elecciones, no es momento de negociar nada”. “Y después de elecciones, sobre un proyecto distinto, con presencia de todos los grupos del arco parlamentario, se puede hablar”, ha añadido.
Arenas pide a Sánchez que dé ideas
Negociación es precisamente lo que propone el PP ante esta postura. El vicesecretario general de Política Autonómica y Local, Javier Arenas, ha garantizado este miércoles el diálogo con el resto de partidos políticos y ha manifestado que Pedro Sánchez, al que pide propuestas, “debería hacer un ejercicio de coherencia” porque el PSOE ha propuesto “en multitud de ocasiones” la elección directa de alcaldes.
Arenas ha dicho que la mayoría de los ciudadanos comparte “una reforma electoral muy simple: que el que gana gobierne y el que pierda, a la oposición“, y ha opinado que el diálogo con el PSOE es “esencial” como segunda fuerza política en España pero no se puede “menospreciar” la posición del resto de grupos parlamentarios.
Pedro Sánchez ya transmitió al presidente del Ejecutivo su oposición a esta medida en la entrevista que ambos mantuvieron el pasado mes de julio. Posteriormente, sin embargo, dejó una puerta abierta a una futura negociación, aunque con el objetivo puesto más allá de las municipales de mayo de 2015.
El PP defiende que esta reforma estaba incluida en su programa electoral, en el que se cita una modificación “para respetar la voluntad mayoritaria”, sin más especificaciones. Sin embargo, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, declaró que “nunca” modificaría el sistema “por mayoría”, como posiblemente ocurra en el Congreso el próximo otoño.
Sin precendentes
En caso de prosperar la propuesta solo con los votos mayoritarios del PP, sería la primera ocasión en democracia en que la ley electoral sería modificada sin el consenso de los dos principales partidos.
Sin el respaldo socialista -aunque muchos consideran que la modificación podría favorecer casi tanto como a los populares (“Este cambio puede beneficiar a los dos”, declaró a El Mundo un diputado popular)-, el partido del Gobierno confía en poder convencer a CiU y al PNV.
Una de las alternativas que baraja Rajoy para conseguir socios en esta empresa es plantear una segunda vuelta en la elección de alcaldes, pero esta propuesta no convence incluso dentro de su partido. La secretaria general, María Dolores de Cospedal, planteó hace unas semanas que sólo se aplique si el más votado no consigue un determinado porcentaje de votos que habría que marcar. El PSOE y UPyD, sin embargo, se muestran favorables a la segunda vuelta independientemente del tanto por ciento de votos.
Los decepcionantes resultados en las últimas elecciones europeas, con la irrupción de partidos minoritarios como Podemos, la consolidación de UPyD y Ciudadanos y el ascenso de Izquierda Unida, podrían haber precipitado la decisión de Rajoy de modificar un modelo que hasta ahora no había puesto en peligro el bipartidismo PP-PSOE.
El PSOE ha asegurado este miércoles que no negociará la elección directa de alcaldes “ni ahora ni nunca” porque, argumenta, “sería avalar un intento antidemocrático y regresivo”.
“El PP sólo busca una elección directa: la del PP”, ha publicado Sánchez en la red social Twitter. Esa es su respuesta a la voluntad del PP de sacar adelante la reforma electoral para que gane la lista más votada y no haya lugar para pactos en los ayuntamientos.
El PSOE no se niega, sin embargo, a una posible modificación que incluyera la elección a doble vuelta y ha dejado la puerta abierta al diálogo, aunque insiste en que debe ser una medida estudiada en profundidad y promovida, por tanto, para después de 2015.
Por su parte, la portavoz de UPyD, Rosa Díez, ha advertido de que si el PP decide sacar adelante la reforma en solitario cometería “un golpe de mano democrático, un atentado a la pluralidad y a las reglas del juego”. La portavoz de la formación magenta ha alertado de que sería “un gravísimo precedente”, por lo que ha confiado en que el partido del Gobierno recapacite y no acometa un cambio que no sería “de regeneración, sino de degeneración”.
IU no negociará
El portavoz de IU en el Congreso, José Luis Centella, ha anunciado ya que su partido no entrará “en ningún tipo de negociación”. “Si el PP quiere cambiar la ley electoral, que lo lleve en su programa para las próximas elecciones. Que sean las próximas Cortes las que decidan”, ha asegurado Centella en declaraciones a EFE.
Centella ha recomendado al PP “ser prudente” en este asunto, porque, si aprueba la reforma ”de manera unilateral, a seis meses de las elecciones y a un año del final de la legislatura”, rompería “todos los canales de comunicación” con la oposición.
Además, ha advertido de que desde su partido utilizarán “todos los recursos” para frenar la reforma, y añade que será “una ley de ida y vuelta” que estará en vigor lo que dure la mayoría absoluta del PP. Esta ley, ha dicho, “evidencia el nerviosismo del PP, que se empeña en hacer la ley electoral más restrictiva y completamente trucada”.
La sorpresa ha sido el rechazo de EH Bildu, una formación que podría verse beneficiado por la reforma y obtener muchas pequeñas alcaldías en el País Vasco. Sin embargo, los parlamentarios Maribi Ugarteburu y Oskar Matute se han opuesto a la medida y han opinado que si el PP la aprueba, “ahondará en un estrechamiento de las libertades y de la propia democracia”.
http://www.republica.com/2014/08/20/la- ... oe_833091/
Re: La gran cacicada electoral
22 Ago 2014, 05:58