El exquisito danés que enamoró a La Rosaleda
El exjugador malaguista durante dos temporadas (1988/89 y 1989/90), regresó al Estadio La Rosaleda casi tres décadas después de su último partido como blanquiazul.
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Mucho ha cambiado la casa de los malaguistas desde que John Lauridsen -2 de abril de 1959, Ribe (Dinamarca)- deleitase a los aficionados con su exquisito fútbol. Fueron sólo dos temporadas, pero su carisma, calidad y entrega caló hondo en el corazón de los malagueños. Un jugador de raza que disputó 68 partidos con la elástica blanquiazul, en los que anotó siete goles.
En la tarde de este pasado martes, Lauridsen volvió a pisar La Rosaleda 28 años después de su último partido con el CD Málaga. En su regreso, se reencontró con viejos conocidos de su etapa en el conjunto malagueño. Antonio Benítez, quien fuera su entrenador durante año y medio y, actualmente, consejero consultivo del Club, recibió a Lauridsen, junto al segundo entrenador del Atlético Malagueño, Juan Carlos Añón, compañero de equipo del exjugador danés a finales de los años 80.
Acompañados del también consejero consultivo Abdullah Ben Barek y del historiador del Málaga CF, Domingo Muñoz, recorrieron cada rincón de La Rosaleda. Desde la remozada sala de prensa, hasta el Museo&Tour MCF, pasando por el túnel de vestuarios y la zona de oficinas.
“Para mí es un orgullo poder volver a este estadio tan precioso. Tuve dos años muy buenos aquí, sobre todo el primero”, señaló Lauridsen a MCFTV durante su visita al feudo blanquiazul.
El primer jugador danés en la historia malaguista quiso mandar un mansaje de ánimo a la afición malaguista: “El Málaga CF tiene equipo más que suficiente para estar en Primera División. Es muy importante que la afición siga animando al equipo”.