Rajoy impone la estrategia del p谩nico en el Partido Popular
- En la reuni贸n secreta que mantuvo en Sig眉enza con su comit茅 de direcci贸n, el presidente del Gobierno advirti贸 que las encuestas se帽alan un demoledor desgaste para el PP en las municipales y auton贸micas
- El l铆der del PP entierra sus planes sobre el aborto o la reforma electoral para evitar cr铆ticas en los meses previos a las pr贸ximas elecciones
- Tras la ca铆da de Ana Botella, el PP estudia ahora c贸mo deshacerse de Alberto Fabra para Valencia



Pese a su mayor铆a absoluta, el Gobierno de Rajoy se ha quedado sin margen de riesgo para las pr贸ximas elecciones municipales y auton贸micas. El presidente del PP ha decidido empezar a soltar lastre y evitar a su partido los temas m谩s pol茅micos, y en los que el PP podr铆a dejarse unos votos de los que no puede prescindir. As铆 se explica la decisi贸n de aplazar la reforma de la ley electoral con la que Rajoy pretend铆a llegar a las municipales en posici贸n de ventaja. Este es el motivo de las dudas que ahora se ciernen sobre la aprobaci贸n de la ley del aborto de Gallard贸n. En esa misma l铆nea se justifica la ca铆da de Ana Botella y la m谩s que probable desaparici贸n de Alberto Fabra del mapa pol铆tico valenciano.

En el caso de la ley electoral, los dirigentes del PP se han servido del PSOE para ocultar su movimiento. Antonio Hernando, reci茅n nombrado portavoz socialista en el Congreso, exigi贸 a sus interlocutores del PP que la reforma electoral quedase fuera de la mesa en la que ambos partidos van a negociar medidas de "regeneraci贸n democr谩tica". Para sorpresa de muchos, el PP acept贸 sin rechistar. El PSOE de Pedro S谩nchez le hab铆a ofrecido la excusa perfecta para guardar en el caj贸n su pretensi贸n de cambiar las reglas del juego electoral.

Con la ley del aborto est谩 ocurriendo algo parecido. Los de Rajoy saben que la reforma de Gallard贸n les quita mucho m谩s de lo que les da. Adem谩s, el Gobierno est谩 dividido en dos grupos de sensibilidades. La postura de la vicepresidenta no coincide con la del ministro de Justicia, y en este punto hay un serio enfrentamiento. Gallard贸n no podr谩 cumplir su promesa de aprobar la ley "antes de que acabe el verano", como prometi贸, y a estas alturas todos dan por sentado que lo del aborto es otro de los temas que acabar谩n en el caj贸n de un Gobierno sin margen para buscarse l铆os antes de las elecciones. No obstante, el departamento de Gallard贸n ha asegurado que "no hay ninguna novedad" al respecto y que "sigue trabajando buscando el m谩ximo consenso posible y ultimando la redacci贸n del proyecto de ley".

No hay prisa para las listas

La preocupaci贸n en el PP es mucho mayor de lo que pudiera indicar la mayor铆a absoluta de la que disfrutan en el Congreso de los Diputados. En la reuni贸n que la c煤pula del partido celebr贸 en Sig眉enza a principios de septiembre, Rajoy ech贸 un jarro de agua fr铆a sobre sus colaboradores m谩s cercanos a los que advirti贸 que los datos de las encuestas ponen al PP en una situaci贸n muy comprometida.

Esa preocupaci贸n movi贸 al l铆der del PP a pedir calma a la hora de confeccionar las listas. "No hay ninguna prisa", le dijo Rajoy a su comit茅 de direcci贸n. S贸lo unas horas despu茅s, Ana Botella se salt贸 la consigna y actu贸 con precipitaci贸n al anunciar su decisi贸n de no presentarse. Con su decisi贸n, la mujer de Aznar reabri贸 la caja de Pandora de las candidaturas en Madrid. Esperanza Aguirre no tard贸 en salir de esa caja para mostrarse.

Mientras tanto, Rajoy intenta solucionar el problema que todas las encuestas le sit煤an en Valencia, donde Alberto Fabra cuenta con todas las posibilidades de perder la mayor铆a absoluta. Convencidos de que Fabra acabar谩 salpicado por el Caso Valmor, en el PP le buscan sustituto. Para esa tarea Rajoy se ha apoyado en Rita Barber谩 a quien cit贸 la pasada semana en Moncloa con la intenci贸n de pedirle consejo.

Con este panorama, el PP no quiere complicarse las cosas m谩s de lo que ya est谩n. En el PP manda ahora la teor铆a del p谩nico: hacer poco y sin ruido.

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